lunes, 28 de noviembre de 2011

SIGUE EL ABUSO POLICIAL EN PANAMÁ

Testimonio de Ricardo Weeks*

Si esto lo hacen con un funcionario adscrito al Ministerio de la Presidencia, como lo es en mi caso, qué no harán con el ciudadano común, que no tiene las posiblidades de denunciar esta situación.

Luego de representar al Estado Panameño, en el Encuentro Iberoamericano del Año Internacional de los Afrodescendientes, AFRO XXI, en Salvador de Bahía, Brasil del 16 al 19 de noviembre, en mi calidad de Secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de la Etnia Negra, irónicamente, he sido nuevamente abusado por la Policía Nacional.

LOS HECHOS:

En horas de la mañana, a las 9:00 a.m. de este martes 22 de noviembre de 2011, me encontraba dentro mi casa, ubicada en San Cristóbal –Juan Díaz- cuando escuchamos que llamaron a mi puerta preguntando por el propietario del vehículo. Al salir me percaté que eran los guardias, para ser exacto, dos motorizados (conocidos como linces).

Desde la calle, me preguntaron los policías: ¿Tú eres el dueño de la Four Runner?

Parado en la terraza de mi casa, les respondí que sí; acto seguido, de manera autoritaria y gritándome, me dicen: Tráeme tus documentos personales y los del carro.

Le dije: ¿Y eso, Comando, a qué se debe? Dijeron que para investigación; luego me preguntaron si el auto no es de la Presidencia. Esto quiere decir que ellos sabían quién era yo. Después me dicen: Este carro está denunciado. Muéstrenos sus documentos y abra el carro. Le pregunté que cómo que denunciado. Y el policía reiteró que ese carro está denunciado, que mantiene armas y drogas en su interior.

Acto seguido, le dije: Bueno, si es así haré algo mejor, que le convendrá a usted y a mí. Llamaré a la prensa y cuando lleguen los medios abriré el auto y así los medios de televisión serán testigos de las armas y las drogas, que usted dice que están dentro del auto. ¿Qué le parece?

Su respuesta fue: Haz lo que te dé la gana, yo reviso ese carro, con o sin tu autorización, hay muchas formas de revisarte ese carro.

Saqué mi celular para filmar la situación y tener mis pruebas, pero el policía se disgustó más y me impidió ni filmar y tomar fotos, que sentía era una forma de protegerme y evidenciar el atropello del que era objeto. Llamé a los medios de comunicación, cuyos números tenía en mi celular, mientras tanto el policía me profería insultos e irrespetos y decía cosas como: Martinelli no te va a durar toda la vida y que le mirara bien la cara.

Entonces ellos llamaron por su radio de policía diciendo que habían detenido un vehículo y el dueño se negaba a abrir el mismo y que en el vehículo se sospechaba habían drogas y armas. En menos de 6 minutos llegaron tres patrullas; dos motorizados conocidos como linces y otra moto de escúter, que al instante rodearon el vehículo y mi casa.

Un teniente, de manera gentil, se presentó y me pidió que saliera de la casa a conversar que todo estaba bien; que él sabía quien yo era. Al salir me recomendó que dejara que la policía me revisara, que sabían que no andaba en nada, pero que así salíamos de eso y evitábamos un escándalo. Le respondí que absolutamente NO.

Ya la policía tenía todo un operativo como si fueran a allanar a uno de los más grandes narcotraficantes de todos los tiempo, pero en esos momentos llegó la prensa y al ver las cámaras en mano, entonces la policía empezó a decir que era un mal entendido y uno a uno se fueron del área. Pero antes un capitán de la policía que me pidió mis documentos y me anotó en una libreta para quién sabe qué, también anotaron la placa del carro; parecía que me estaban fichando. Ellos no quisieron dar entrevista a los medios y también les pedían que no filmaran. Yo les pedí a los policías sus datos (nombre y número de agente, etc.), pero se echaron a reír y me dijeron en tono de burla, “averígualo tú”; se fueron y dejaron todo así-

No puedo decir cuál era su intención, si pretendían meterme algo en el carro, por la cantidad de veces que no les permito que se propasen conmigo, porque violan mis derechos ciudadanos.

DENUNCIA

No es la primera vez que los agentes de policía han tratado de violentar mi derecho al libre tránsito, al principio de la inviolabilidad de la propiedad privada, sin que medie autorización. Y en los casos en que solicitamos una explicación de las acciones policiales en mi contra, recibo como respuesta malas palabras, atropellos y hasta inclusive he sido retenido en una estación de policía.

La discriminación y el racismo al que somos sometidos, por parte de la policía, no solo mi persona, sino los afrodescendientes en este país, no podemos tolerarlos. Somos ciudadanos con iguales derechos que el resto de la sociedad.

No vamos a permitir que se nos sigan prejuzgando, exhibiendo, y violando nuestros derechos, por el simple hecho de ser afrodescendiente y reclamar en derecho una explicación del por qué la actuación policial.

Si esto lo hacen con un funcionario adscrito al Ministerio de la Presidencia, como lo es en mi caso, qué no harán con el ciudadano común, que no tiene las posiblidades de denunciar esta situación.

*Ricardo Weeks
Secretario Ejecutivo
Consejo Nacional de la Etnia Negra
Ministerio de la Presidencia

1 comentario:

  1. Es muy triste lo que esta pasando en este pais. Dejame decirte que el trato abusivo no solo es a los afrodescendientes sino tambien a los blancos y peor aun MUJER. El martes 24 de enero, yo y mi esposo tambien extranjero fuimos abusados por la policia de bella vista, fuimos golpeados, empujados y agredidos como animales. No hay razon alguna para tratar a una persona asi y menos a una mujer. Pero que puedo hacer? si denunciar no sirve de nada en este pais. Por siacaso guardo pruebas de los moretones y raspones que tngo en todo el cuerpo. Ellos necesitan una placa y arma para sentirse alguien, por que saben que como seres humanos son unos fracasados desperdicios de la sociedad. Y ellos son los mismos delincuentes.

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