Por: Claudia Mosquera Rosero-Labbé*
*Idcarán- Ces-Universidad Nacional de Colombia*
No comprendo aún por qué razón los organizadores de las importantes
discusiones de los sectores sociales no habilitaron un espacio formal para
hablar de la agenda sociopolítica hemisférica de los descendientes de
africanos que habitan las Américas negras, como lo tuvieron los pueblos
indígenas. En todos los ejes escogidos para la discusión: pobreza y
desigualdades sociales, desastres naturales, acceso y uso de nuevas
tecnologías, seguridad e integración física, líderes y lideresas de los
pueblos negros tienen elaboradas posiciones políticas que hubiese sido
bueno dar conocer a los cancilleres de cada país.
Decepcionante el papel de los medios de comunicación que cubrieron este
evento lo hicieron con mucha ligereza analítica, parecían cubriendo un
reinado de belleza y no una reunión diplomática de importancia, además
demostraron una vez más un craso desconocimiento de la historia y de las
culturas negras del país. Vanesa de la Torre refirió que los habitantes de
San Basilio de Palenque hablaba la “lengua palenque”, y una periodista del
Canal Institucional encargada de cubrir el evento de la entrega no fue
capaz de explicar a los televidentes la importancia que tiene Palenque en
la historia de Colombia, otra desaprovechó la oportunidad de dar a conocer
las apasionantes historias en torno al fuerte de San Felipe de Barajas.
Pero quizá lo más desafortunado fue el afro show del día 15 de abril en la
Plaza San Pedro Claver encabezado por el presidente Santos ¿Sabe el nuevo
presidente Santos que la entrega de esos títulos colectivos, de ninguna
manera hacen parte de su programa bandera de restitución de tierras? Estos
títulos colectivos son emblemáticos porque despacifican la Ley 70 de 1993 y
caribeñizan esta Ley, además hacen parte de procesos organizativos
étnico-territoriales de larga data. No sé con qué intencionalidad se
realizó esta ecuación.
Obama recibió una información errada, por eso su discurso se escuchó
desenfocado, parecía diciendo locuras. Durante el excluyente acto de la
Plaza, el presidente cometió dos grandes errores. El primero de protocolo,
¿acaso la Cancillería no contaba con traductores que acompañaran la visita
del presidente Obama a la iglesia católica que guarda los restos de un
misionero que no goza de la simpatía de los afroprogresistas? Vi aburrido a
Obama con la historia que contaba el sacerdote y el guía traductor
presidente. Intuyo lo que le dijeron y para distanciarse de esa historia
criolla en su discurso afirmó dirigiéndose a la poca gente afro allí
presente: "no lejos de aquí sus antepasados se compraban y se vendían", el
presidente afroestaudinense no hace parte de esa historia, quedó claro. No
fue una buena idea esa visita ni dar a conocer a ese personaje. El segundo
error ocurrió durante la entrega de los títulos colectivos, Santos fue
incapaz de decir algo sensato sobre la importancia de ese título colectivo
para Palenque, para el novel historiador Santos ahora resulta que Palenque:
“declaró la Independencia en este país”, y aprovechó para presentarse como
el nuevo defensor de las comunidades negras, afirmó: “le estamos dando unos
títulos el día de hoy a unas comunidades que se lo merecían hace muchísimo
tiempo”
Qué ofensa a la legendaria y sostenida dignidad del pueblo palenquero,
cuyas conquistas reposan en la altivez y el trabajo. El presidente debió
reconocer en este momento que este lugar patrimonio inmaterial de la
humanidad está en peligro por su ubicación estratégica en los Montes de
María y que hoy la titulación colectiva es la única forma de proteger este
lugar de memoria que pertenece tanto a Colombia como a la diáspora africana
en el mundo de la cual Obama sí hace parte. Debió reconocer que las pocas
hectáreas que se titularon en la Boquilla fue lo que quedó después de la
embestida de los agentes del progreso, los cuales dejaron sin territorio a
esta humilde comunidad de pescadores artesanales. El afro show fue
revelador del enorme desconocimiento que tiene el presidente Santos de la
población afrocolombiana y de sus reivindicaciones étnicoterritoriales, una
población que representa el 10, 5 % del total de la población nacional. El
último error de protocolo corrió por cuenta de la Cancillería, el primer
alcalde negro de Cartagena, Campo Elías Teherán Dix no fue invitado a este
importante acto, y nadie se explica por qué apareció Shakira en la escena.
Sería bueno saber con qué entidades encargadas de los asuntos afro coordinó
la Cancillería o nadie responde institucionalmente por los afros dentro del
gobierno de la prosperidad?
No hay comentarios:
Publicar un comentario